Los niños que son burlados en clase, durante el recreo o en un autobús escolar normalmente no quieren ir a la escuela. Estas burlas son difíciles de evitar, a pesar de intentarlo tanto los profesores como los padres.
Muchos niños se enfadan cuando son llamados por un nombre con el cual ellos se sientan insultados y que de algún modo lo están ridiculizando. Los padres no siempre pueden hacer algo en contra de esto, pero lo que si pueden hacer es enseñar a sus hijos estrategias para hacer frente a las burlas.
Ya que desde mi punto de vista lo mejor es saber hacer frente a comentarios que te afectan sin tener que contestar con otro insulto.
Los niños que aprenden estas habilidades a edades tempranas, les servirán de mucho provecho para su adolescencia y sobre todo para afrentar burlas u otros problemas en el futuro.
Existen dos tipos de bromas, las dañinas, que son aquellas que afectan o molestan a la persona hacia la que va dirigida y la broma como juego, que es aquella que resulta divertida tanto para la persona que la hace como para la que se dirige.
Los niños hacen bromas por diferentes motivos como para recibir atención, desde mi punto de vista es la más frecuente, muchos niños sienten que no son el centro de atención, cosa que la mayoría de los niños desean, y saben perfectamente que si hacen algo malo se van a dirigir hacia ellos aunque sea para regañarles, pero ellos sienten que por un momento son el centro de todas las miradas y sienten que consiguen lo que querían; por imitación, muchos niños lo hacen porque en sus casas se burlan de ellos y lo hacen para sentirse mejor además de hacerlo porque es lo que han aprendido en sus hogares; influencia de los medios, es una de las más frecuentes y en mi opinión una de las que podríamos evitar, porque como ya sabemos los niños de hoy en día pasan demasiadas horas delante de los medios de comunicación, este tipo de burla se adquiere al ver los medios de comunicación, porque como bien sabemos en la mayoría de los programas existen burlas, desprecios, humillaciones y falta de desprecio, cosas que los niños las absorben como si fueran esponjas. Y no solo se ve esto en los programas sino también en los juegos, la mayoría de los juegos y dibujos de acción lo que se ven son constantes luchas y desprecios hacia una persona; otra causa es la de sentimientos de superioridad o poder, muchos bromistas se sienten mejor y más poderosas al insultar y desvalorizar a una persona, pero yo pienso que con esta actuación demuestran todo lo contrario, la persona que desvaloraliza a otra lo hace porque ella no es feliz y se siente mal y al insultar a otra lo que consigue es que esa persona se sienta igual que ella.
Existe una serie de estrategias que los padres les pueden enseñar a sus hijos para prevenir que estas burlas les afecten:
Una es la auto-conversación: consiste en hacer que el niño se haga unas preguntas lentamente cuando reciba alguna burla como por ejemplo ¿Qué opinión es más importante, la del embromador o la mía? O ¿es verdad la broma?, entre otras.
Otra estrategia consiste en hacer ver que esa burla te ha molestado, de esta forma el embromador se siente ignorado y haces que no se vuelva a repetir esto.
Otra es la respuesta de “¿qué?”, con esto trasmites a la persona que pretender molestar tal indiferencia que la burla no importa.
Por último, utilizar el humor, ya que de esta forma demuestras que todo lo que está diciendo el embromador no te está afectando y el embromador para.
Existen muchas otras formas de evitar la burla, pero para mí, estas son las más importante y efectivas.
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